Viaje Por Carretera En Finisterre: 14 Días De Escapadas Llenas De Yodo Desde La Península De Crozon.
¿Sueñas con una Bretaña salvaje, decididamente marítima, donde cada curva revela un nuevo panorama digno de una postal? Establécete en Telgruc-sur-Mer, abróchate el cinturón y sigue nuestro programa de dos semanas en Finisterre. Caminatas por el GR34, kayak en cuevas turquesas, ciudades medievales llenas de historia... e incluso una incursión hasta la Costa de Granito Rosa: he aquí un itinerario denso pero respirable, salpicado de paradas gastronómicas y anécdotas (¡a veces legendarias!) que harán brillar los ojos de toda la familia.
¿Por qué elegir Telgruc-sur-Mer como campamento base?
Situada en el borde oriental de la península de Crozon, Telgruc-sur-Mer ofrece un punto de partida ideal: playa de Trez-Bellec para el baño, acceso directo al GR34 para los caminantes y vista XXL sobre la bahía de Douarnenez. El pueblo se mantiene a una distancia razonable de Brest (1 h) y de Quimper (1 h), permitiendo así escapadas más lejanas sin cambiar de alojamiento.
Bretaña en cifras: un imán para viajeros
En 2024, la región de Bretaña ha registrado 111 millones de pernoctaciones turísticas: un ligero retroceso en comparación con 2023 (-3 %) pero aún así +2 % versus 2022. Los visitantes extranjeros ahora representan el 22 % del total, impulsados por un retorno masivo de británicos, alemanes y neerlandeses. En Finisterre, algunos lugares emblemáticos como la Punta de Raz rozan el medio millón de visitantes anuales (500 000 desde los años 1980). Es claro que el fin del mundo bretón está lejos de ser un secreto... pero aún es posible disfrutarlo lejos de las multitudes ajustando los horarios y combinando lugares estrella con joyas menos conocidas.
Itinerario de 14 días: lo esencial de Finisterre (y una escapada por la Costa de Granito Rosa)
Día 1: Acantilados de Guern (5 min desde Telgruc)
Primera caminata en el GR34: 4 km de acantilados cubiertos de brezo, vistas impresionantes de la bahía y regreso por la playa de Trez-Bellec. Lleven binoculares: a menudo se observan alcatraces y delfines.
Día 2: Kayak en las cuevas de Morgat (20 min)
Por la mañana, salida del puerto de Morgat para 3 horas de remo. A las chicas les encanta pasar bajo los arcos coloreados de la cueva Sainte-Marine, donde la luz hace que el agua se vea esmeralda. Nivel principiante aceptado si el mar está tranquilo.
Día 3: Punta de Pen-Hir & Tas de Pois (35 min)
Acantilados de 70 m, búnkeres en lo alto y vista panorámica de 360° sobre el Iroise. Opción de picnic frente al ballet de gaviotas.
Día 4: Océanopolis, Brest (1 h)
Inmersión en tres pabellones (polar, tropical, bretón). Cuenten 4 horas de visita, perfecto en caso de lluvia.
Día 5: Quimper medieval (1 h)
Catedral de Saint-Corentin, casas con entramado de madera, creperías... y compras de cerámica. Por la noche, regreso tranquilo a través del valle del Odet.
Día 6: Locronan, pueblo de granito (40 min)
Calles adoquinadas detenidas en el siglo XV. Suban hasta la capilla Ar Sonj para disfrutar de la vista de la bahía.
Día 7: Mercado gourmet en la sidrería Rozavern (5 min)
Cada lunes por la noche de verano, productores locales, concierto folk y degustación de sidra natural. Llévense una caja: la fermentación artesanal es excelente.
Día 8: Costa de Granito Rosa (Perros-Guirec) (2 h 30)
Largo camino pero garantizado el wow-factor: caos rosado de Ploumanac'h, faro de Mean Ruz, sendero de los aduaneros... Antes de volver, baño en Trestraou.
Día 9: Bosque de Huelgoat (1 h 30)
Caos granítico, leyendas artúricas y la Roca temblante. Bucle de 7 km fresco y sombreado; perfecto para la mitad del viaje.
Día 10: Punta del Raz (1 h 30)
¡Rumbo al oeste! Se camina 4 km ida y vuelta hasta el extremo del cabo, frente al legendario Raz de Sein. En el lugar, 275 m de desnivel acumulado: prevean buen calzado.
Día 11: Ciudad amurallada de Concarneau (1 h 20)
Paseo por las murallas, pescado fresco en el mercado matutino y luego relax en la playa de Sables-Blancs.
Día 12: Isla de Ouessant (30 min hasta Camaret + ferry 1 h 30)
Día de bicicleta: 20 km de asfalto (plano) para conectar el faro de Créac'h, la playa de Porz Doun y la crepería del pueblo. Último barco a las 18h.
Día 13: Punta de los Españoles (40 min)
Restos de Vauban, panorama sobre la rada de Brest y puesta de sol rojiza. Se recomienda un pequeño desvío por la ensenada de l'Auberlac'h.
Día 14: Playa de Trez-Bellec (en el lugar)
Descanso: paddle, siesta y últimos kouign-amann frente al mar.
Los imprescindibles de Finisterre... y algunos datos
- 166 km: longitud total del circuito del GR® 34 alrededor de la península de Crozon, que se puede completar en 8 días por los más experimentados.
- 70 m: altura de los acantilados de Pen-Hir, el lugar preferido de los escaladores.
- 115 millones de pernoctaciones turísticas en Bretaña en 2023 (récord histórico).
- 500.000 visitantes anuales estimados en la Pointe du Raz: se recomienda llegar antes de las 10 h o después de las 17 h para disfrutar de la tranquilidad.
- 300 días/año: promedio de viento medido en alta mar cerca de Ouessant (¡ideal para los aficionados a la vela!).
Preparar su estancia: consejos prácticos
Desplazamiento: el coche sigue siendo imprescindible, pero anticipa trayectos pequeños y sinuosos (30 km pueden llevar 45 min). Estacionamiento de pago en los grandes sitios durante el verano; opta por compartir coche o utilizar la lanzadera de las playas cuando esté disponible.
Presupuesto: cuenta con 8-10 € por una crepe completa + jarra de sidra, 25 € por una excursión en kayak, 28 € por la entrada a Océanopolis, 35-40 € por un viaje de ida y vuelta en ferry para Ouessant (peatón + bicicleta alquilada en el lugar).
Clima: sí, puede llover tres veces en el mismo día: eso también es lo que contribuye a la luz mágica de la región. Superpone capas ligeras en lugar de un abrigo pesado.
Nótese Bien
GR34: apodado "Sendero de los Aduaneros", este camino costero señaliza más de 2 000 km alrededor de Bretaña. Los tramos de Crozon están entre los más espectaculares, pero también los más expuestos al viento. Respeten la flora dunar: permanezcan en el sendero.
Mareas: la amplitud puede superar los 7 m en la bahía de Douarnenez. Consulten la tabla de mareas antes de cualquier salida en kayak o baño.
Conclusión: Finisterre, un sabor que te invita a volver.
En catorce días, habrás rozado el fin del mundo (literalmente), probado crepes de mantequilla salada y caminado sobre las huellas de los aduaneros, corsarios... e incluso del rey legendario Gralon, fundador de la mítica ciudad sumergida de Ys, que, según la tradición, todavía dormiría bajo las olas de la bahía de Douarnenez. Una razón más para volver: quién sabe, quizás una noche de tormenta oigas resonar las campanas de Ys bajo el oleaje.
Anécdota: El rey Gralon, figura emblemática de las leyendas bretonas, reinaba en Ys antes de que la ciudad se sumergiera. Algunos narradores sitúan su palacio en el mismo lugar de Telgruc; ¡algo que añade un escalofrío mítico a tu viaje por carretera!